La perforación del prospecto comenzará el 14 de julio. La estatal tiene 42 proyectos de exploración

Wilman Yabeta, vicepresidente de Contratos y Fiscalización de YPFB, informó que la tasa de éxito del pozo exploratorio de Villa Montes X7 es de un 19%. La estatal tiene un plan agresivo de exploración con 42 proyectos, de los cuales 27 ya están en ejecución en diversas etapas

Recientemente, el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, hizo una inspección al proyecto que se ubica en el departamento de Tarija.

El funcionario subrayó que la exploración de pozos petrolíferos y gasíferos es un proceso largo y costoso, que puede llevar hasta siete años desde la fase de exploración hasta el inicio de la explotación.

Por ejemplo, el pozo Villa Montes X7 requiere una inversión de aproximadamente Bs 201 millones (cerca de 30 millones de dólares). Explicó que la tasa de éxito geológico para este tipo de proyectos es del 20% a nivel mundial.

“Según los estudios que tenemos para ambas formaciones que estamos buscando, ya sea Chorro o Tupambi, en el Pozo Villa Montes X7 tenemos un 19% de probabilidad de éxito geológico. Tenemos información de pozos aledaños que nos van armando mejor el rompecabezas de lo que hay en el subsuelo”, explicó.

La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos calculó un potencial de 1,5 trillones de pies cúbicos (TCF, por sus siglas en inglés).

Los costos de este proyecto son asumidos por YPFB Casa Matriz, a través de su Gerencia Nacional de Exploración y Explotación.

Los trabajos de perforación comenzarán el 14 de julio y se estima que tomará alrededor de ocho meses. El objetivo es alcanzar una profundidad de 4.360 metros, explorando las formaciones de Chorro y Tupambi). 

La producción, estimada en 27 millones de pies cúbicos día, se transportará a la planta La Vertiente, situada a 10.2 kilómetros del pozo.

Expertos ven túnel oscuro

Los expertos Hugo del Granado y Raúl Velásquez, investigador en energía e hidrocarburos de la Fundación Jubileo, señalaron que Bolivia atraviesa un túnel oscuro y sin salida para resolver el problema de las reservas de gas, como consecuencia del fracaso de la política hidrocarburífera del gobierno nacional, según reporte de la red Erbol.

Del Granado sostuvo que ha tomado tiempo pasar de ser un país con abundantes reservas a prácticamente quedarse sin gas, con la consiguiente disminución de la producción de todos los combustibles fósiles y, por lo tanto, el incremento de la importación para poder abastecerse.

Por su lado, Velásquez señaló que Bolivia enfrenta no solo un problema de exploración o producción, sino un problema integral en el sector hidrocarburífero.

“No hubo exploración, no hubo gestión de nuevos mercados, no hubo ampliación de la red de transporte, la capacidad de refinación mejoró muy poco. Hoy en día, el país importa más gasolina y diésel que antes y estamos a puertas de volvernos también importadores de gas», explicó.

Fuente: El Deber