La embajada de Bolivia en Paraguay hace gestiones para hacer llegar a los camineros elementos de primera necesidad y brigadas de salud para que los atiendan.
Tras el reporte de las precarias condiciones en que se encuentran los transportistas de cisternas con placa boliviana en Paraguay, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) gestiona la habilitación de parqueos adecuados en salubridad y seguridad.
Asimismo, la Cancillería informó que la embajada boliviana en el vecino país alista asistencia médica para los choferes de más de 400 cisternas varadas.
“Vamos a ver de habilitar parqueos en los puntos de importación que tenemos tanto en Perú, Chile, Paraguay y Argentina; con las condiciones necesarias para estos choferes”, indicó este miércoles el director de Comercialización e Importaciones de YPFB, Ariel Montaño.
Explicó que el costo de esos parqueos deberá ser cancelado por las empresas transportadoras de combustible, pero si éstas no lo hacen, “lo hará YPFB y les descontará de los costos que actualmente cobran por su servicio”.
Embajada en Paraguay
Mediante un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores señaló que a través de la embajada de Bolivia en Paraguay está coordinando las gestiones de asistencia a los conductores de cisternas con placa boliviana.
La nota indica que se pidió a las autoridades paraguayas a cargo de salud, que puedan gestionar brigadas para atender a los transportistas.
“Desde la embajada de Bolivia se están realizando las gestiones para hacerles llegar elementos de primera necesidad. Asimismo, se está coordinando con otras instituciones en Paraguay; como la Intendencia Municipal y otros organismos como la OIM (Organización Internacional de Migraciones), Cruz Roja Internacional, la posibilidad de brindar asistencia adicional a los conductores; teniendo siempre presente el bienestar de nuestros connacionales” (sic), dice la nota.
Los choferes varados en el vecinos país reportaron que cinco de sus colegas fallecieron en las últimas semanas; mientras aguardaban su turno para cargar combustible.
Fuente: La Razón