El Banco Mundial afirmó que el precio del barril de petróleo podría alcanzar los 157 dólares estadounidenses si se produce una escalada en la guerra entre Israel y Hamás. En el informe «Perspectivas sobre los mercados de materias primas», publicado este lunes (30 de octubre de 2023), la institución financiera presenta valoraciones preliminares sobre las posibles consecuencias del conflicto. Aquí está el texto completo (PDF — 2 MB, en inglés).
Según el documento, la guerra que comenzó el 7 de octubre ha tenido hasta ahora «impactos modestos» en el mercado mundial de materias primas. Los precios del petróleo aumentaron alrededor del 6%. Los valores de los productos agrícolas, metales básicos y otras materias primas «no cambiaron».

El Banco Mundial presenta las siguientes estimaciones sobre el precio del petróleo, si el conflicto no se extiende a otros países de la región:

* en este cuarto trimestre debería alcanzar una media de 90 dólares por barril; * en 2024 debería alcanzar un promedio de 81 dólares por barril;

Sin embargo, el informe considera que un agravamiento del conflicto empeorará «rápidamente» las perspectivas de precios. El análisis del Banco Mundial trabaja con posibles consecuencias en 3 escenarios de riesgo, considerando el «grado de perturbación» en el suministro de petróleo:

* «pequeña perturbación»: la oferta caería entre 500.000 y 2 millones de barriles por día (entre el 0,5% y el 2% de la oferta mundial en 2023). El precio aumentaría entre un 3% y un 13% respecto al promedio del trimestre actual. El costo sería de 93 a 102 dólares por barril; * «interrupción moderada»: la oferta caería entre 3 y 5 millones de barriles por día (entre el 3% y el 5% de la oferta mundial en 2023). El precio aumentaría entre un 21% y un 35%. El costo sería de 109 a 121 dólares por barril; * «gran perturbación»: la oferta caería entre 6 y 8 millones de barriles por día (entre el 6% y el 8% de la oferta mundial en 2023). El precio aumentaría entre un 56% y un 75%. El costo sería de 140 a 157 dólares por barril;

Según el economista jefe adjunto del Banco Mundial, Ayhan Kose, un «shock severo» en los precios del petróleo aumentaría la inflación de los precios de los alimentos. «Una escalada del conflicto intensificaría la inseguridad alimentaria, no sólo en la región, sino también en todo el mundo», afirmó.

La institución financiera también advierte que las autoridades de los países en desarrollo tendrán que tomar medidas para gestionar un posible aumento de la inflación global. «Dado el riesgo de una mayor inseguridad alimentaria, los gobiernos deberían evitar restricciones comerciales como la prohibición de las exportaciones de alimentos y fertilizantes», dice el informe.

Fuente: Poder 360