En 2023 se creará una nueva unidad de negocios que integrará diferentes tipos de combustibles hasta llegar en 2050 a cero emisión de gases. En ese tránsito, trabaja para ser una petrolera sostenible. 11 Diciembre de 2022 15.56 Ancap creará en 2023 una nueva unidad de negocios que integrará la explotación de combustibles fósiles,hidrógeno verde, azul o gris (más contaminantes), para una transición «pragmática» a la meta del 2050 de un «cero neto» global en emisión de gases con efecto invernadero.

Busca pasar de ser «una petrolera» a una «empresa de energía». Mientras llama a buscar crudo en la plataforma marina y su presidente apela a «ser petrolero y sostenible», el ente debe demostrar que no recurrirá a la antiquísima táctica de cambiar nombre o sigla para que todo siga igual.

PINTARSE LA CARA

La nueva unidad de ANCAP liderará la transición, uniendo su área petrolera con los otros hidrógenos, sin limitarse al verde no contaminante.

No dejarán afuera al hidrógeno azul —que poluye al procesarse pero entrampa el CO2 en cuevas o ductos subterráneos para que no siga haciéndolo— ni al tipo gris desde combustibles fósiles como el gas.

«Está decidido» que la administración de combustibles «no sea más una petrolera de oil & gas para convertirse en empresa de energía», revelan a Forbes Uruguay jerarcas inmersos en esa reingeniería, partidarios del pragmatismo y «no del fanatismo» en activistas y académicos que exigen dejar de buscar petróleo, pues el suministro necesario no lo garantizará «el hidrógeno verde a solas».

SABER QUE SE PUEDE

El IV Foro de Inversión Europea ‘Transformar el futuro a través de las energías renovables’, del 24 y 25 de este mes, logró adelantar proyectos uruguayos —vía rueda de negocios sobre plataforma virtual B2B— para las firmas europeas del sector eólico, fotovoltaico, biomasa e hidrógeno verde.

Unión Europea colaborará en la «descarbonización global», como mayor inversor aquí en la inicial transición de renovables. La segunda transición energética de Uruguay desde 2021 busca cuidar a ese socio estratégico en la cadena de valor del hidrógeno verde, según la hoja de ruta oficial (junio de 2022).

HOJA DE RUTA

Tomando como punto de partida las emisiones de gases con efecto invernadero de 1990, las metas globales son: 2030: Reducirlas a la mitad (a 45% de la base).

2050: Alcanzar la neutralidad (0% neto de emisiones).

QUERER QUE SE PUEDA

Para captar inversión en hidrógeno verde se debe apelar más a «estas ruedas de negocios y trato directo con contrapartes, que esperar al Banco Europeo de Hidrógeno» con 3.000 millones de euros de la Comisión Europea (CE), «pues está aún en pañales», confió a Forbes un alto diplomático de la Delegación de UE en Montevideo.

La presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, pretende financiar el «futuro mercado del hidrógeno» y cerrar «la brecha de inversión», potenciando «la economía del futuro, esto es, el Pacto Verde Europeo», que duplicará a 2030 el hidrógeno producido hasta 10 millones de toneladas. La diversificación de proveedores será con «socios fiables».

El ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini, enalteció en entrevista con Forbes ese camino que tomó Europa y dijo que «en Uruguay, el hidrógeno verde puede atraer mucha inversión» para un «producto de exportación interesante».

COLOR ESPERANZA

Para cortar en 2030 el 55% de emisión de efecto invernadero en 1990, está el hidrógeno gris, azul y verde. El arcoíris de la Agencia Internacional de la Energía probó alta polución del negro (procesado de metano), marrón (del carbón) y gris (del gas natural) que más se usa hoy.

El azul de baja emisión contamina al procesar gas, pero captura 90% del CO2 en cuevas o ductos, método «más viable de conseguir bajas emisiones a corto plazo» creen los operadores petrolíferos españoles.

Otros bajos son el hidrógeno turquesa con pirólisis de gas sobre metal fundido, dejando carbono sólido que no poluye; amarillo con electrólisis de energía solar o fuente fósil; rosa de energía nuclear y el blanco gaseoso en depósitos subterráneos naturales.

El hidrógeno verde, de cero emisión y fuente renovable, procede del agua, biomasa o biogas. Se apuesta a que el año 2030 cueste menos que el gris.

GIRANDO SIEMPRE EN UN LUGAR

El hidrógeno exige energía antes para poder generarla, conservarla y exportar; es una solución para la eólica o solar que se pierden por generarse a deshora o con interrupciones (intermitencia). Al agua se le divorcia con electrólisis el hidrógeno del oxígeno.

Al petróleo, gas natural y metano se los vaporiza u oxida, liberando hidrógeno. El dilema es que el enlace de carbono y oxígeno arroja monóxido (CO) y dióxido de carbono (CO2). Las turbinas de Salto Grande giran generando hidroelectricidad, pero tienen todo para sumar hidrógeno verde.

Su presidente, Carlos Albisu, irá en noviembre a Bariloche a visitar empresarios argentinos del ramo y, traerlos ante el presidente Luis Lacalle Pou. La meta es obtener hidrógeno del agua de la represa con su electricidad renovable.

VENTANAS SE PUEDEN ABRIR

El programa H2U coordina instituciones en la Hoja de Ruta del Hidrógeno Verde. Presidencia lanzó el Fondo Sectorial del Hidrógeno Verde, de US$ 10 millones, para quien gane el concurso de H2U Innovación. Incentivos fiscales, permisos y tarifas especiales otorga H2U Inversiones. Hasta ahora una firma pidió permiso ambiental de localizarse.

En ANCAP aspiran a ser pivots, dicen a Forbes Uruguay, y atraer «dinero de grandes players energéticos que conocemos y nos conocen pues proyectos pequeños no son considerados». Hy24, mayor fondo global de hidrógeno, comprometió 2.000 millones de euros este mes que impulsarán 20.000 millones en proyectos.

CAMBIAR EL AIRE DEPENDE DE TI

Se invierte en energías renovables 90% de lo que se hace en fósiles (que son 80% de la energía). Debería ser 400% más a 2030 y exigirá US$ 114.400 millones a 2050 para la emisión cero y un calentamiento global no mayor a 1,5º. El Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático urgió a la Alianza Financiera del Net Zero, de bancos y seguros, a solventar el corte a mitad de las emisiones a fin de esta década.

La electricidad mundial es 29% de renovables (97% en Uruguay) y debe ser 90% en 2050. Presidentes del orbe van a Egipto del 6 al 18 de noviembre a la COP 27 de Cambio Climático, buscando financiar la transición en países no ricos. Para 2050, el Hydrogen Council cree que el hidrógeno cubrirá quinta parte (18%) de la energía terrícola, si es que invertimos US$ 23.000 millones/año hasta 2030.

TENTAR AL FUTURO

El horizonte lejano obstruye distinguir inversión de gasto. EE.UU., UE, Rusia, China, Japón y Corea del Sur dedicaron a un reactor US$ 10.000 millones tras «energía limpia de amplia disponibilidad, que sustituya la dependencia global del petróleo», ya hace 16 años.

Este deja-vu con el hidrógeno alerta de un nuevo ecosistema que acepte la resistencia de players tradicionales, enlenteciendo su salida o perpetuando riesgos de la especie bajo algunas variantes de H.

La industria festeja el paso a medios ecológicos de producir y transportar, pues venderá recambio antes que los medios previos queden obsoletos. Así, energías limpias, autos eléctricos e hidrógeno prometen 30 millones de empleos, mientras las sucias tientan extender su amortización con eufemismos o etiquetas coloridas.

Fuente: Forbes