Armin Dogarthen, titular de YPFB, dijo que la eficiencia actual de la factoria es del 100%.
La reactivación de la planta de urea y la comercialización del producto, en cuatro meses, generó más de $us 100 millones, por lo que el Ejecutivo ya piensa en la construcción de una segunda planta, del doble del tamaño de la actual.
“Logramos poner en producción la planta y llegar a una eficiencia del 100%. Los resultados son exitosos y tener una segunda planta de urea es negocio para Bolivia porque conocemos el mercado y tenemos la tecnología”, dijo Armin Dogarthen, titular de la estatal petrolera a Bolivia Tv.
La reactivación de la planta urea inició en septiembre de 2021.
La urea es un fertilizante elaborado a partir de gas natural que posibilita el crecimiento de cultivos agrícolas como trigo, caña de azúcar, arroz, maíz, además de frutas y hortalizas.
En 2017 arrancó la producción de esta planta petroquímica ubicada en la zona central del trópico de Cochabamba.
Su capacidad diaria de producción es de 2.100 toneladas de urea y 1.200 de amoniaco.
Estuvo paralizada durante 22 meses por la crisis política y social de 2019 y por la pandemia debido al Covid, en 2020.
El daño económico fue de $us de 450 millones.
Fuente: La Razón