Actualmente se llevan adelante proyectos exploratorios para certificar los recursos evaporíticos existentes en los salares de Coipasa (Oruro) y Pastos Grandes (Potosí). Estas actividades permitirán a Bolivia superar los 21 millones de toneladas métricas de recursos que tiene en la actualidad en el Salar de Uyuni, el más extenso del mundo.
“No hacemos exploración para buscar si hay o no litio, porque está a lo largo y ancho de los salares. La exploración, que se realiza a través de la perforación de pozos que tienen entre 30 y 50 metros de profundidad, nos permite identificar y cuantificar las áreas donde hay mayor concentración de litio”, explicó el viceministro de Altas Tecnologías Energéticas, Álvaro Arnez.
La autoridad indicó que estos proyectos permitirán, a través de la cuantificación de recursos, delimitar las reservas de litio explotables.
“Cuando hablamos de recursos, nos referimos a la cantidad total de litio que tenemos en un salar. Pero cuando hablamos de reservas, nos referimos a la cantidad existente y asequible que puede ser explotada posteriormente dentro del proceso de la industrialización”, señaló el viceministro.
Una vez que concluya la fase de exploración, se tendrá un enmallado de las zonas de mayor concentración de litio en los salares de Coipasa y Pastos Grandes y se procederá a la perforación de pozos productores. La localización de estos pozos será fundamental para la ubicación de futuras plantas de Extracción Directa de Litio (EDL) que permitan industrializar el litio boliviano, dijo la autoridad.
La cuantificación de recursos en estos salares incrementará sustancialmente la cantidad de recursos evaporíticos que ya posee Bolivia en Uyuni, afianzándolo como el país con la mayor cantidad de litio en el mundo a nivel de salares. Este hecho atraerá inversiones para industrializar el ‘oro blanco’, lo que genera certidumbre que el litio se convertirá en un pilar fundamental de la economía boliviana para el 2024.
Fuente: Energía Bolivia