Frente a los efectos del precio internacional, YPFB impulsa desde el año pasado el Plan de Reactivación del Upstream, que viabiliza una inversión de aproximadamente $us 1.400 millones para el sector hidrocarburífero.
En medio del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el precio internacional del petróleo sufrió un incremento en los mercados. En Bolivia se experimentará un impacto “positivo y negativo”, que en lo primero se traducirá en una mejora en la renta petrolera.
“Evidentemente, los efectos de un cambio en el precio de un commoditie (crudo) nos va a afectar. En ese caso, en Bolivia tenemos un efecto positivo. Se va a incrementar la renta petrolera. El precio de venta del gas natural va a subir, entonces vamos a tener una mayor renta petrolera”, explicó a La Razón el presidente ejecutivo de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen.
Agregó que lo “negativo” es que subirá la compra de combustibles como gasolina y diésel. “El lado negativo que tenemos es que somos importadores de combustibles, entonces la importación de combustible va a subir. Sin embargo, si lo vemos en una balanza entre beneficio y perjuicio, el beneficio es mayor al perjuicio”, argumentó.
Frente a los efectos del precio internacional del petróleo, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) impulsa desde el año pasado el Plan de Reactivación del Upstream, que viabiliza una inversión de aproximadamente $us 1.400 millones para el sector hidrocarburífero.
“Estamos trabajando en un plan desde hace un año, no solamente por la situación coyuntural de ahora, sino porque ya se visualizó que era importante cambiar esta situación de la importación de combustibles y se trabaja en el tema biocombustibles, biodiésel; la importación de crudo para darle un valor agregado nosotros y volverlo diésel o gasolina, volverlo carburante. Se trabaja en el tema de exploración de campos petroleros. Todo esto nos va a permitir bajar, fuera de la situación coyuntural. En general poder disminuir la importación de combustibles, que ese dinero se quede en Bolivia en inversiones y en empleo”.
Con este plan, la estatal tiene una carpeta de 17 proyectos exploratorios para ejecutar en Santa Cruz, Cochabamba, Chuquisaca, Tarija, Beni, Pando y La Paz.
Fuente: La Razón