El Gobierno nacional espera la llegada de especialistas extranjeros para que determinen el tipo de daño que tiene la planta de urea y amoniaco, además del costo y tiempo que requerirá su reactivación, indicó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina. Entre tanto, un grupo de especialistas de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y sus subsidiarias trabajan por tiempo y materia para realizar un diagnóstico rápido de la situación de la planta.

“Hay turbinas afectadas y otros equipos electrónicos dañados. Se han contratado expertos para hacer una evaluación y puedan determinar con precisión los daños, los tiempos, recursos para corregir, enmendar y hacer operar la planta”, dijo Molina.

El presidente de YPFB, Wilson Zelaya, explicó que los extranjeros ayudarán a realizar una revisión minuciosa de la factoría, para reiniciar operaciones seguras sin causar otros daños.

“Sabemos que hay que tener mucho cuidado con el arranque de la planta; (si hay) alguna condición que no esté bien observada, puede llevar a causar daños gravísimos a los equipos menores y mayores, y eso es lo que debemos cuidar”, dijo.

El presidente de YPFB explicó que los expertos extranjeros tienen experiencia de más de 20 años en manejo de este tipo de plantas.

El daño económico causado por el cierre de la planta hace más de un año se calcula en 200 millones de dólares.

Fuente: Los Tiempos