La electricidad de plantas de energía solar es ahora más barata que la electricidad tradicional. En América Latina crece la inversión en esa fuente y en Bolivia y Perú se promueve su uso.

“Estamos experimentando un cambio considerable en los mercados eléctricos del mundo”, dice Christian Breyer, profesor de economía solar en la Universidad LUT de Finlandia y experto en energía global. La electricidad procedente de las grandes plantas de energía solar es ahora más barata que el precio medio en el mercado de la electricidad: “En India, por ejemplo, las centrales eléctricas de carbón están siendo reemplazadas, porque no tienen ninguna posibilidad económica frente a la fotovoltaica”. Según Breyer, esta tendencia se intensificará en los próximos años.

Al mismo tiempo, los costos de almacenamiento de las baterías están disminuyendo. Breyer está seguro de que “veremos cambios significativos en el mercado en la segunda mitad de esta década. Se trata de grandes centrales fotovoltaicas con baterías. Luego abarcarán mayores cuotas de mercado de la electricidad. Eso significa que será aún más difícil para las centrales  eléctricas convencionales”.

La energía fotovoltaica 

En la revista especializada Science, Breyer describe los pilares del desarrollo futuro junto con más de 40 investigadores solares internacionales. Hoy en día, los módulos solares en tejados y parques solares generan poco más del 3% de la demanda mundial de electricidad. “En 2030 probablemente será del 35%”, dice Breyer.

Los expertos suponen que la producción mundial de sistemas fotovoltaicos aumentará de los actuales 730 gigavatios (GW) a alrededor de 10.000 gigavatios (GW) para 2030; y para 2050 incluso de 40.000 a 70.000 GW.

La energía solar solía ser cara y es una de las razones por las que para muchos es difícil imaginar que será probablemente la energía dominante de este siglo: “Son barreras mentales y hay que eliminarlas ahora”, afirma Breyer. “Es la fuente de energía más barata del mundo, con algunas excepciones. En algunos lugares, la energía eólica es un poco más barata”, añade.

Hoy -según Breyer- la energía solar de nuevas grandes centrales eléctricas en países con buenas condiciones de radiación cuesta alrededor de 2,5 céntimos de euro por kilovatio hora (kWh). En países con menos sol como Alemania, es alrededor de un céntimo más. Y en las “mejores ubicaciones del mundo”, como el desierto de Atacama en Chile, es incluso más barata, dos céntimos de euro por kWh, según dice Breyer.

 A modo comparativo: la generación de electricidad en nuevas centrales eléctricas de carbón, gas natural y nuclear es considerablemente cara en la Unión Europea: entre seis y 19 céntimos por kWh.

Para transporte y calefacción

Aunque los coches eléctricos siguen siendo relativamente caros en la actualidad, el abandono del petróleo en el transporte ya ha comenzado. La caída de los precios de las baterías hará que los vehículos sean más y más baratos en el futuro. Y debido a que los motores eléctricos son particularmente eficientes, según la comparación de costos hecha por el Automóvil Club Alemán, muchos autos eléctricos ya son más baratos que aquellos con motores de combustión.

Por lo tanto, el Centro de Gestión Automotriz de Colonia espera un fuerte aumento en las ventas de vehículos que funcionan con baterías. También se puede ver un cambio de tendencia en la calefacción. 

¿Acabará la era del petróleo?

Debido a la pandemia de coronavirus, la gente viaja menos en medios de transporte y la economía se está viendo negativamente afectada, por lo que se usa menos petróleo. Después de la pandemia, se espera que el cambio de tecnología y la orientación más ecológica del suministro de energía aceleren el rechazo al petróleo. La Agencia Internacional de Energía, sin embargo, estima que en los países asiáticos aumentará la demanda de petróleo.

El experto en energía Hans Josef Fell, del Grupo Energie Watch, advierte de una “depresión económica con graves consecuencias si no se contrarresta activamente con energías renovables”. Cuando hay escasez de demanda, los precios del petróleo y del gas bajan y las empresas se declaran en quiebra. Las quiebras también son una amenaza para los bancos si los préstamos no se devuelven. Por lo tanto, Fell ve que se podría producir un colapso económico, como en 2008 después de la quiebra del banco de inversión Lehman Brothers.

Brilla en América Latina

Según datos del Climascopio 2014, en el año 2013, la inversión en energías renovables en los 26 países de América Latina y el Caribe subió a 14.000 millones de dólares. De entre estos, el 94%  (13.000 millones) fueron en Brasil, México, Chile, Perú y Uruguay. Las reformas energéticas implantadas durante los últimos años han contribuido al desarrollo de las energías renovables.

El aumento de la energía solar se debe a, “con algunas diferencias de país a país, mediante subastas dedicadas a largo plazo destinadas a fomentar la capacidad renovable”, dijo a DW Antonio Scala, director de Enel Green Power de América del Sur. “Incluso si el crecimiento histórico puede parecer impresionante, podemos esperar una aceleración drástica del desarrollo renovable en la región”, anunció.

“La oferta hidroeléctrica se ve afectada por la necesidad de seguridad energética y los efectos de sequías e inundaciones”, explicó a DW a Christian Hübner, director del programa regional de seguridad energética y cambio climático de la Konrad-Adenauer-Stiftung. Por ello y considerando las condiciones geográficas de la región “urge cubrir la demanda con energías alternativas como las renovables”.

En México se rompen récords

El pasado marzo, Enel Green Power puso en marcha la primera etapa de la planta solar más grande del grupo en América Latina. Con alrededor de 2,3 millones de paneles solares, la planta cubre unas 2.400 hectáreas del estado de Coahuila, México. El parque cuenta con una inversión de 650 millones de dólares y una capacidad de 754 megavatios y pretende aportar energía a 1,3 millones de hogares.

Argentina en la promoción

Argentina ha pasado de dar la espalda a la energía solar a promoverla. El año pasado, el expresidente Mauricio Macri anunció que se habían adjudicado 59 proyectos (20 fueron de energía solar) en 17 provincias a través del Plan RenovAr. Asimismo, el pasado 2017 también se aprobó la Ley de Generación de Energía Distribuida, que crea la figura del autoconsumo y el usuario generador de energía.

Con un presupuesto de casi 400 millones de dólares, el parque Cauchari Solar que ocupa 800 hectáreas abastece a 100 mil hogares. Finalizado en mayo, el parque situado en Cauchari, en la provincia argentina de Jujuy, está a 4.000 metros   sobre el nivel del mar. Dispone de 1,2 millones de paneles solares y cuenta con un banco chino, el Export-Import Bank of China, como mayor inversor.

Brasil cerca de su meta

Este año, la compañía eléctrica francesa EDF gestionará una instalación fotovoltaica con una capacidad de 400 megavatios, tras la puesta en marcha de un tercer parque en el sureste de Brasil. Estas instalaciones contribuirán al objetivo del país suramericano de generar en 2030 el 23% de su electricidad a partir de fuentes renovables, sin contar con las hidráulicas.

Chile, a pasos agigantados

Chile,   en 2012 sólo tenía cinco megavatios de energía solar y 11 megavatios de capacidad solar instalada en 2013. No obstante, el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet aprobó más de 80 proyectos solares y eólicos. La rapidez con la que ha avanzado el país lo ha posicionado como líder de la región, junto con México y Brasil, en cuanto a crecimiento.

Centroamérica

Honduras es el país líder en Centroamérica y el tercero en América Latina. En un breve periodo instaló una docena de plantas solares en Choluteca y otras regiones del país. El parque fotovoltaico Nacaome-Valle, inaugurado en 2015, cuenta con 480.500 paneles solares, en una extensión de  un  millón de metros cuadrados, y su producción permite abastecer a más de 71.500 hogares del país.

La energía solar no espera

Otros países latinoamericanos como Bolivia y Perú también están promoviendo el uso de energía solar. En el último caso se pretende proveer de energía a 2,2 millones de peruanos de las zonas rurales a través de la extensión de redes y paneles solares. Por este motivo, está previsto un proyecto de financiamiento, instalación, operación y mantenimiento de hasta 500 mil paneles solares.

Fuente: Página Siete