El presupuesto del ministerio de Economía de Martín Guzmán establece dos partidas específicas para la producción. Es clave para el shale neuquino.La producción de gas en Vaca Muerta puede dar más respuestas a las necesidades del país. Así se evitaría importar más y presionar los dólares del BCRA.
Los detalles del nuevo precio estímulo para la producción de gas todavía no fueron oficializados. Sin embargo, hay una primera pista acerca de cuánto recibirá con las transferencias de fondos para garantizar la demanda durante el 2021. El dato se desprende del proyecto de presupuesto que el ministro de Economía Martín Guzmán ya envió al Congreso de la Nación.
El plan, que Guzmán comenzó a revisar cuando la Secretaría de Energía pasó a su órbita, estaba casi acordado con las empresas del sector. Según fuentes del gobierno nacional, el nuevo plan está en una instancia de “actualización”. ¿Qué significa esto? Que el gobierno ajusta el gasto fiscal respecto de la iniciativa inicial para vincularlo a las metas macroeconómicas en un contexto plagado de dificultades.
Como sea, sin el nuevo precio estímulo, que tendría la forma de un subsidio transferido a sectores de la demanda, las productoras no reactivarán las áreas gasíferas, principalmente de Vaca Muerta, lo que supondría que los campos gasíferos inyecten un menor volumen de gas planteando interrogantes acerca del suministro del próximo año.
Llegada esa instancia, el país debería importar gas presionando más los dólares del Banco Central de la República Argentina.
Según pudo saber +e de fuentes de la industria, el proyecto de presupuesto que envió Guzmán prevé para el Plan Gas 20645,4 millones de pesos. Tal como lo adelantó este medio, el Plan Gas 4 prevé premiar con el mejor precio al 67% de la producción neuquina, compuesta en su mayoría por gas no convencional, en sus variantes shale y tight (gas de arenas compactas).Esto implica que, en los hechos, el precio de mercado que se determine tendrá un aporte adicional que provendrá de este fondo, mejorando el rango de ganancias y ajustándolo en un contexto de bajos precios y falta de mercados durante buena parte del año.
El proyecto de presupuesto enviado por Guzmán al Congreso prevé un dólar oficial de 102,4 pesos.
La transferencia de recursos, no obstante, será para un sector que, a través de este aporte, reactivaría la actividad en un segmento de la producción que viene en pleno retroceso en el último año.
A través de otra asignación presupuestaria, el gobierno, también transferirá 58.056 millones de pesos para el pago del subsidio al gas no convencional establecido por la resolución 46 del ministerio de Energía de la Nación, en el 2017, que fijó un subsidio a la producción. Ese plan, que resultó impagable en medio del contexto económico en el que entró el país al promediar el 2019, incluyó un sendero decreciente de precios para el gas entre ese momento y el 2021, último año de vigencia.
Al margen de un estímulo a la oferta que implicaría un aporte a la producción, para Neuquén el nuevo plan gas es sustancial. También para la Cuenca Austral, los puntos del país de donde provendrá la mayoría del gas.Tendrá un impacto en los niveles de actividad, duramente golpeados por el derrumbe del sector, que tuvo un punto de partida con el freno al precio interno del crudo, en un contexto en el que la cotización internacional del Brent, el crudo que se toma como referencia en Argentina, podía implicar una mayor inflación vía combustibles.
Desde entonces, la tendencia fue a un freno cada vez mayor en los campos petroleros y gasíferos.
Un nuevo plan estímulo no implicaría una actividad inusitada, pero contribuiría a garantizar condiciones de actividad que las provincias necesitan como pocas veces, cruzadas como están por las restricciones que impuso la pandemia. Sería un respaldo a los puestos de trabajo, al entramado pyme, y a la recaudación impositiva y para las regalías.
Fuente: Energía y Transporte