Especial CBHE NEWS.- Noticias del contexto energético de Brasil y Bolivia a 20 años del contrato de gas ‘GSA’, el final del mismo y las perspectivas para futuros acuerdos.

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No son 20, sino 83 los años de relación energética entre Brasil y Bolivia. Lo visto en las últimas décadas es fruto del empuje de varios años entre ambos Estados para finalmente sellar en los años 90´s una relación comercial ‘gasificada’ y de conveniencia mutua. El actual contrato vence a finales de 2019 y ya se han establecido las primeras reuniones para su continuidad. Mientras eso sucede, es necesario conocer la historia desde sus inicios. Las idas y venidas y el éxito del contrato GSA.

Los fructíferos resultados que produce el gas natural son corolario de una perseverante historia que comenzó hace varias décadas. La relación energética de Bolivia y Brasil es de larga data: 83 años de idas y venidas, con cambios, añadidos, proyectos en el imaginario que luego se desvanecían en el aire, pero que fueron labrando el terreno para sembrar y después cosechar. Y todo comenzó en el siglo pasado.   

Ocho décadas ya tiene esta historia. Y desde hace 20 años Bolivia factura millonarias sumas por la venta de gas natural, ese que desde julio de 1999 ingresó al gran mercado brasilero. La historia de esta exportación comenzó con el envío de menos de 2 millones de metros cúbicos por día (MMmcd), para llegar a los de 31 MMmcd en su mejor momento. Y el precio empezó a menos de un dólar por millón de BTU (Unidad Térmica Británica), ahora está en alrededor de los $us 5. Sin embargo, alcanzó un pico por encima de los $us 8.

A poco de iniciado el segundo tercio del siglo XX, en 1936, los gobiernos de Bolivia y Brasil formaron una comisión mixta para “realizar estudios técnicos” de los yacimientos petroleros en Bolivia. En ese entonces, la integración energética binacional pasaba por los hidrocarburos líquidos.

LA HISTORIA COMIENZA

Corría el año 1936, las conversaciones entre los gobiernos de Bolivia y Brasil habían comenzado para llegar al Protocolo del 24 de noviembre, suscrito en Itamaraty, la Cancillería de Brasil. El acuerdo versaba sobre el “aprovechamiento y exportación del petróleo boliviano por territorio brasileño”. Este documento lleva las firmas de los ministros Plenipotenciarios de Bolivia, Alberto Ostria Gutiérrez, y de Relaciones Exteriores de Brasil, José Carlos de Macedo Soares. Un año después, la Comisión Mixta acordó conclusiones y recomendaciones que fueron aprobadas por el Protocolo del 25 de noviembre de 1937.

Posteriormente, el 25 de febrero de 1938, los ministros Plenipotenciario de Bolivia, Alberto Ostria Gutiérrez, y de Relaciones Exteriores de Brasil, Mario Pimentel Brandao, firmaron el Tratado sobre Salida y Aprovechamiento del Petróleo boliviano. Este documento fue ratificado en agosto, del mismo año, por Ley de la República en el Gobierno de Germán Busch. Pactaba la realización de estudios topográficos y geológicos para determinar “el valor industrial” de los yacimientos nacionales, que debían ser explotados en sociedades mixtas para abastecer el mercado brasileño y otras plazas.

En el transcurso de los años se cumplieron acciones acordadas en 1936, también prosiguieron las tratativas para el ingreso de empresas brasileñas a realizar trabajos de exploración petrolera en Bolivia, de acuerdo con los datos de una nota aclaratoria fechada en enero de 1952.

DEL PETRÓLEO AL GAS

“Bolivia se compromete a vender y Brasil a comprar en condiciones y precios de mercado internacional todo el gas de las empresas privadas de capitales brasileños producido” en el área acordada en 1938. Este hito histórico, específicamente para el energético fósil menos contaminante, se produce en 1958.

Dos décadas tuvieron que pasar, desde el inicio de los acuerdos, para que se llegue a este punto de inflexión en la relación energética boliviano-brasileña. Era el 27 de enero de 1958 cuando se suscribió el Acta de la Entrevista en Corumbá y Roboré de los Cancilleres de Bolivia y Brasil. En ese encuentro de autoridades de ambos países se trató el tema del gas natural y hasta del tendido de un gasoducto que uniera ambos territorios.

En los Acuerdos de Roboré del 58, los dos países también pactaron “efectuar estudios completos” de las reservas de petróleo y gas natural en Bolivia, de acuerdo con lo señalado en un documento del ministro de Relaciones Exteriores del país, Manuel Barrau Peláez, al canciller brasileño, José Carlos de Macedo Soares.

Entre misivas y delegaciones, que iban y venían, continúan trabajando en el marco del Tratado de 1938, ampliado en documentos posteriores.          Inclusive cuando el país ya tenía sellada la compraventa de gas con Argentina, en 1972, Bolivia y Brasil ratificaron el mutuo interés en la integración energética. El entonces director General de Petróleo, Carlos Miranda, y el jefe de la División Amazonia de la Cancillería de Brasil, Luis Orlando Gelio, hablaron de la compraventa de 200 millones de pies cúbicos por día (MMpcd), pero en el mediano plazo. Además de 15 toneladas diarias de gas licuado de petróleo (GLP) y 12.000 barriles diarios de crudo.

En julio del mismo año Brasil planteó su interés de comprar hasta 300 MMpcd, transportado en un gasoducto de 24 pulgadas, además de instalar una planta termoeléctrica y trabajar en proyectos de siderurgia, amonio y otros. También se habló de un “complejo binacional boliviano-brasileño para fertilizantes y la construcción de un gasoducto”.

Más de un año después, en noviembre de 1973, se firmó el Acta de Cooperación entre Brasil y Bolivia en el Campo de los Hidrocarburos, Siderurgia y Otros Proyectos Industriales Relacionados, que incluía siderurgia, petroquímica, industria del cemento, generación de energía eléctrica. Brasil insistió en su deseo de comprar gas natural, además en volúmenes mayores. Se habló de 6,79 MMmcd por 20 años. Hasta se fijaron precios. Bolivia pidió 0,60 dólares por 1.000 pies cúbicos y Brasil planteó 0,50 dólares. Brasil ofreció financiamiento.

En mayo de 1974, los presidentes Hugo Banzer y Ernesto Geisel rubricaron el Acta de Cooperación y Complementación Industrial. Documento que establece el compromiso de Bolivia para vender más de 6 MMmcd de gas natural y Brasil garantiza la compra por 20 años. Bajaron volúmenes y tiempo de duración, comparando con otro acuerdo, el de 1972.

Los presidentes Hernán Siles Zuazo y Joao Batista Figueiredo, de Bolivia y Brasil, respectivamente, firmaron convenio en 1984. En el Gobierno de Víctor Paz Estenssoro, 1985-1989, múltiples comisiones fueron y vinieron. En esta época se fortalecieron las intenciones de la compraventa de termoelectricidad. Proyecto que nunca se materializó. En 1988, Paz suscribió un acuerdo con su par brasileño, José Sarney.

LA VENTA SE CONCRETA

Las idas y venidas culminaron en el primer contrato de compraventa suscrito entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y Petroleos Brasileiros (Petrobras). El 23 de febrero de 1993 es la fecha que ya quedó en las memorias de ambos países. El volumen contractual fue acordado entre 8 y 16 MMmcd, gas que debía llegar hasta Curitiba a través del gasoducto de 28 pulgadas. Para llegar a este final feliz, las negociaciones empezaron en 1991, con el entonces ministro de Hidrocarburos, Herbert Müller. 

Herbert Müller

Ya con un contrato en la carpeta, las negociaciones se intensificaban, pero el proyecto perseguido por décadas aún no se hacía realidad. Pasaron más de tres años y solo con el contrato definitivo, suscrito el 4 de septiembre de 1996, se selló irreversiblemente el convenio comercial boliviano-brasileño. Pero todavía faltaban recursos económicos para poner en marcha la obra. Petrobras concretó una “compra anticipada” del gas boliviano, amortizando más de $us 400 millones.

El cordón umbilical que lacraría la mutua dependencia sería el gasoducto binacional. Este nuevo hito histórico comenzó a ejecutarse en julio de 1997, concluyendo la primera fase en plazo en diciembre de 1998. La colosal obra fue entregada el 29 de febrero de 1999, lista para ser utilizada. Comenzó el llenado de la línea para que el 1 de julio del mismo año se abran las válvulas de la exportación de gas natural boliviano al gigante mercado vecino. Desde hace 20 años Bolivia vende su energético, generando millonarias facturas y cuantiosos ingresos fiscales.

Luego la historia relata ampliaciones al contrato original con seis adendas, suscritas entre ejecutivos de YPFB y Petrobras. Esos documentos sellan pago de licuables, flexibilización del GSA, compraventa interrumpible de gas natural para Cuiabá, entre otros.

El gas natural boliviano recorre 3.100 kilómetros, entre la planta de Río Grande en Santa Cruz y la de Porto Alegre en Brasil. De ese total, 557 kilómetros de ducto están en Bolivia. Esta grandiosa obra costó $us 2.200 millones. La “ruta óptima”, Puerto Suárez-Corumbá, para la salida del energético fue acordada en marzo de 1992. El gasoducto tiene 30 pulgadas de diámetro hasta San Pablo.

ROMPIENDO EL CINTURÓN

El arribo del gas boliviano a Brasil no fue “coser y cantar”. Por el contrario, kilómetros de documentos, actas, acuerdos y desacuerdos, idas y venidas de comisiones gubernamentales y empresariales demuestran que es un proyecto de varias décadas de conversaciones. Para entrar a ese mercado tuvo que profanar el “cinturón de castidad” que tendieron alrededor de San Pablo, el centro industrial del país vecino.

En principio, 1958, los convenios que manifestaban las intenciones de integración energética eran tratados y acordados entre delegados de los gobiernos de Bolivia y Brasil. Recién en la década de los 70 comenzaron a involucrarse las empresas petroleras estatales de ambos países.

Otro hito legendario en la larga historia de intentos de integración energética binacional ocurrió en 1991, con la apertura del mercado paulista para el gas boliviano. En noviembre de ese año se firmaron las primeras actas de intención para el envío de 8 MMmcd. Razones económicas, pero principalmente de lucha contra la contaminación, obligaron al Gobierno brasileño y a Petrobras a cambiar la matriz energética. Esta necesidad fue la llave que abrió las puertas de Brasil, pues el gas de Bolivia ingresó a San Pablo a sustituir el fuel oíl más contaminante.

PARA LA HISTORIA

FECHA DOCUMENTO
24 Nov. 1936 Se forma la Comisión Mixta Boliviano-brasileña para el Estudio de los problemas relativos al Aprovechamiento y Exportación de Petróleo Boliviano.
30 Sep. 1937 Conclusiones y recomendaciones de la Comisión Mixta Boliviano-Brasileña.
25 Nov. 1937 Protocolo que aprueba Recomendaciones de la Comisión Mixta Boliviano-Brasileña.
25 Feb. 1938 Tratado sobre Salida y Aprovechamiento del Petróleo Boliviano.
09 Jul. 1938 Notas Reversales sobre Formación de empresas mixtas.
19 Ago. 1938 Ley promulgada por el presidente Germán Busch, que ratifica el Tratado suscrito el 25 de febrero de 1938
17 Ene. 1952 Notas Reversales aclaratoria y ampliatoria de Brasil sobre delimitación de áreas para exploración petrolera en Bolivia por empresas mixtas.
27 Ene. 1958 Acta de la Entrevista en Corumbá y Roboré de los Cancilleres de Bolivia y de Brasil. Inicio del interés de Brasil por el gas boliviano.
29 Mar. 1958 Nota Reversal Adicional Concerniente a la Exportación Transitoria de Petróleo
22 Mar. 1972 Acta de las Reuniones Sostenidas entre las Delegaciones de Bolivia y Brasil sobre Aspectos de Cooperación en Hidrocarburos y otros.
28 Jul. 1972 Acta de las Reuniones Realizadas por el Grupo Técnico Mixto Brasil-Bolivia en Río de Janeiro, referentes a la Viabilidad de Cooperación entre los dos países en el Campo de Hidrocarburos.
30 Nov. 1973 Acta de Cooperación entre Brasil y Bolivia en el Campo de los Hidrocarburos, Siderurgia y Otros Proyectos Industriales Relacionados.
22 May. 1974 Acta de Cooperación y Complementación Industrial. (Acuerdo Banzer-Geisel)
09 Feb. 1984 Acuerdo Siles-Figueiredo
1991 Brasil manifestó interés por gas boliviano para San Pablo.
25 Mar. 1992 Acta Reunión sobre Integración Energética Bolivia – Brasil. (Definición ruta óptima de gasoducto Puerto Suárez-Corumbá)
17 Feb. 1993 Firma del primer contrato de compraventa de gas natural
16 Ago. 1996 Firma Contrato de Pago Anticipado de Petrobras.
04 Sep. 1996 Firma contrato definitivo
04 Sep. 1996 Contrato “llave en mano” para tendido del gasoducto en Bolivia.
26 Dic. 1998 Conclusión obras del gasoducto.
09 Feb. 1999 Inauguración del gasoducto Río Grande-San Pablo.
 01 Julio 1999 Inicio del envío de gas boliviano a Brasil.
2003 Gobierno de Lula da Silva plantea negociar precios y volúmenes.
14 Feb. 2007 Firma de Acta para el pago de licuables.
12 May. 2007 Nacionalización de las Refinerías de Petrobras en Bolivia
Oct. 2007 Firma nuevos contratos con petroleras que operan en Bolivia. 
2008 Récord en exportación, 31 millones de metros cúbicos por día.
2009 Cuarta adendas (Trato comercial de licuables)
2012 Quinta adenda
18 Ago. 2014 Sexta adenda

Documento publicado originalmente en la revista Petróleo & Gas # 79. Reeditado en diciembre 2019. Autor original: Julieta Tovar.

20 años de gas